martes, 15 de febrero de 2011
ALMA DESNUDA
Amaneceres violetas allá en la lejanía,
de aquella tierra azul como el espacio,
la joya mas hermosa que el topacio
viendo todo aquello mi amor se confundía.
Me sorprendió la quietud de la bahía
de las aguas fundiéndose despacio,
al entrar en la muralla del palacio
del libro abierto que yo nunca entendía.
Una raíz profunda muy dentro de mi mente,
me confundía con la sombra alargada
del ciprés que Delibes escribió sabiamente.
El viento ululaba en la hondonada
del pensamiento que fluye inteligente,
dentro del alma sensible y desgarrada.
Paquita Sánchez Gómez
martes, 8 de febrero de 2011
SOLEDADES
PIEDRA A PIEDRA
En el silencio del puerto
allí se encuentra María,
dando de mamar al niño
que es su amor y su alegría.
El Rey de cielos y tierra
allí vive con su madre,
entre el arrullo del viento
en las grandes soledades.
Desde el puerto se divisan
todos los pueblos del valle,
María a todos los cobija
es para todos su madre,
Esa Virgen tan bonita
que entre los canchos está,
es Patrona de Plasencia
orgullo de la ciudad.
Los placentinos la adoran
y le rezan con cariño,
llevando en su corazón
a esa Virgen y a ese Niño.
Piedra a piedra construyeron
una ermita para ella,
la hicieron allá en lo alto
muy cerca de las estrellas.
Querían que estuviera allí
para que fuera vigía,
y guardara a la ciudad
por la noche y por el día.
Madre del amor hermoso
sin pecado concebida,
envuélvenos con tu amor
y también con tu alegría.
Paquita Sánchez Gómez
allí se encuentra María,
dando de mamar al niño
que es su amor y su alegría.
El Rey de cielos y tierra
allí vive con su madre,
entre el arrullo del viento
en las grandes soledades.
Desde el puerto se divisan
todos los pueblos del valle,
María a todos los cobija
es para todos su madre,
Esa Virgen tan bonita
que entre los canchos está,
es Patrona de Plasencia
orgullo de la ciudad.
Los placentinos la adoran
y le rezan con cariño,
llevando en su corazón
a esa Virgen y a ese Niño.
Piedra a piedra construyeron
una ermita para ella,
la hicieron allá en lo alto
muy cerca de las estrellas.
Querían que estuviera allí
para que fuera vigía,
y guardara a la ciudad
por la noche y por el día.
Madre del amor hermoso
sin pecado concebida,
envuélvenos con tu amor
y también con tu alegría.
Paquita Sánchez Gómez
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